El proyecto defiende un diseño basado en tres principios: representatividad, seguridad y funcionalidad, convirtiendo al complejo, de una superficie bruta de 135.482 m2, en un destacado icono civil que represente al Ministerio del Interior de Kuwait.

Biografía

El estudio de arquitectura AGi architects se crea en el año 2006 de la mano de dos jóvenes arquitectos formados en la Universidad de Harvard, Joaquín Pérez- Goicoechea y Nasser B. Abulhasan. Con un claro carácter internacional y un enfoque multidisciplinar, AGi architects ofrece un servicio profesional que apuesta por la calidad, la creatividad y el diseño exclusivo, con el fin de crear ambientes que aporten un valor diferencial a lo largo del tiempo. Actualmente, cuenta con oficinas en Kuwait y Madrid, donde trabaja un equipo de 40 profesionales. Entre los últimos reconocimientos al trabajo de AGi architects se encuentran tres premios WAF (2013, 2011 y 2010), dos galardones

en los Middle East Architect Awards 2013 -que se suman a los tres concedidos en la edición de 2012-, dos menciones en los MIPIM Architectural Review Future Projects Awards 2012, y diversos galardones en las últimas ediciones de los Cityscape Awards y los International

Property Awards, entre otros. Bonyan Design es una compañía que ofrece servicios integrales de arquitectura e ingeniería de la construcción con más de veinticinco años de experiencia en planificación, diseño y supervisión. Su práctica incluye estudios de viabilidad, servicios de pre-desarrollo, planificación, arquitectura, ingeniería de construcción y gestión de la construcción. Una de las principales preocupaciones de Bonyan Design es la construcción de la identidad arquitectónica de Kuwait que se refleja claramente en el proyecto Fresh Food Souks y la renovación de tres mezquitas históricas.

Datos del edificio

Nombre: Dirección General del Sistema de Información (General Department of Information System, GDIS)

Autores: AGi architects & Bonyan Design

Equipo: Joaquín Pérez-Goicoechea, Nasser B. Abulhasan, Salvador Cejudo

Arquitectos colaboradores: Daniel Muñoz, Carmen Sagredo, Daniel Bas, Adamira Herrero, Alfredo Carrato, Ana Lopez Cerrato, Lucia Azurmendi, Javier Alonso, Nicolás Martín, Moyra Montoya, Maria Álvarez labrador, Hanan Alkouh, Robert Varghese, Sarah Al Fraih, Bonyan Design

Tipo: Institucional | 135.482 m2 |

Concurso: Primer premio

Localización: Kuwait

Cliente: Ministerio del Interior y Ministerio de Obras Públicas

Renders: idearch studio

Desde lejos, el edificio se percibe como un conjunto elevado en el terreno; los edificios de oficinas, ligeros y transparentes, se muestran ante el ciudadano como un hito singular. En una aproximación más cercana se denota el carácter robusto de la construcción en su contacto con el suelo.

Se ha concebido un espacio interior que funciona como plaza urbana, donde los momentos de interacción visual y funcional se producen entre lo «público» y «privado», de forma similar a las sinergias de la vida diaria. Este vestíbulo da acceso a los diferentes edificios y aloja todo tipo de actividades complementarias.

El pavimento inteligente permite tanto la interacción entre el entorno y el usuario como el conocimiento de «lo que está pasando en la calle». Este sistema también ofrece servicios de conectividad y geoposicionamiento, sin interferir en la estética.

 

El edificio aspira a transmitir de una forma clara, limpia e icónica la dualidad conceptual de la que se nutre: la tecnología, innovación, transparencia y accesibilidad al ciudadano, son conceptos que contrastan fuertemente con las ideas de seguridad, fuerza y estabilidad, características inherentes al proyecto en tanto en cuanto el edificio aloja las dependencias del Ministerio de Interior. Desde lejos, el edificio se percibe como un conjunto elevado en el terreno; los edificios de oficinas, ligeros y transparentes, se muestran ante el ciudadano como un hito singular en el paisaje urbano. En una aproximación más cercana se denota el carácter robusto de la construcción en su contacto con el suelo: el edificio surge del terreno con un carácter pétreo, a modo de podio, abriéndose al público en tres puntos de acceso, mientras que los edificios de oficinas quedan en un plano superior. El podio se ha concebido como un grueso muro que envuelve el complejo por los cuatro costados, protegiendo y salvaguardando el edificio con aberturas mínimas para reforzar la seguridad. El muro de protección sólo se interrumpe en la planta baja para permitir el acceso público en los límites interiores del edificio, lo que se logra mediante tres aberturas principales que se separan y tratan de manera diferente, atendiendo a los diferentes usuarios del edificio: empleados, invitados VIP y visitantes. La entrada de visitantes está cubierta con un gran voladizo en piedra que invita al acceso. El podio se eleva hasta a una altura de ocho metros. Esta dimensión, junto al uso continuo de piedra mate y un gran voladizo, provoca una sensación de poder y seguridad. Sobre el podio, los diversos edificios de la Dirección crecen por separado hacia adentro y por encima del muro de seguridad monolítico estableciendo conexiones entre sí a través de la transparencia visual existente, evocando un ambiente de campus. Esta fachada transparente está cubierta con una piel protectora que permite la entrada de la luz solar al mismo tiempo que evita la exposición excesiva a la luz directa que resulta perjudicial. Durante el día, el diseño de los edificios y las aberturas permiten que la luz llegue a las secciones más profundas del edificio, y por la noche la transparencia de la estructura superior transforma el volumen convirtiéndolo en un icono de la ciudad y del país. Se introducirá tecnología avanzada, no sólo para las operaciones de seguridad y administración, sino también para la gestión y regulación del edificio. La integración de esta tecnología, junto con un plan de organización funcional y la composición formal, se traducirá en un edificio singular que represente un sentido de la unidad del Estado, fortaleza y orgullo.

Planta baja – Vestíbulo El vestíbulo principal es un elemento fundamental de la propuesta de AGi architects y Bonyan Design. El programa del edificio es de gran complejidad, los flujos, accesos y la organización del espacio tienen que ser muy funcionales y eficaces. Por ello, se ha concebido un espacio interior que funciona como plaza urbana, donde los momentos de interacción visual y funcional se producen entre lo «público» y «privado», de forma similar a las sinergias de la vida diaria. Este vestíbulo da acceso a los diferentes edificios y aloja todo tipo de actividades complementarias, desde exposiciones hasta celebraciones, recepciones, etc. Hay tres puertas principales de acceso al edificio. En la fachada principal, dos grandes arcos separarán el flujo de circulación de los invitados VIP de la subsecretaría de los visitantes habituales de la instalación, con diversos grados de control de seguridad y privacidad. Los empleados tendrán acceso al edificio desde la parte de atrás, a través de una entrada segura y con enlace directo a la estructura del aparcamiento de empleados. De este modo, se maximiza la eficiencia de los flujos basados en la separación de las entradas para los diferentes tipos de usuarios. La planta baja está rodeada por un muro de servicio de ocho metros de altura, doblándose como un muro de defensa para la protección del edificio. Las vías de evacuación y conexión de servicios se establecen a partir de este muro en dos niveles, con una vía de servicio ubicada en todo el perímetro para el acceso de vehículos.

Pavimento cerámico inteligente Esta superficie cumple con su función convencional, además de proporcionar la infraestructura necesaria para suministrar servicios de información a los ciudadanos en las zonas públicas. El pavimento inteligente permite tanto la interacción entre el entorno y el usuario como el conocimiento de «lo que está pasando en la calle». Este sistema también ofrece servicios de conectividad y geoposicionamento donde las antenas y los GPS no son posibles, sin interferir con la estética.

Lucernarios Los volúmenes transparentes de los espacios de trabajo de las oficinas suspendidos sobre el vestíbulo principal actúan como lucernarios que permiten que la luz entre a través de las fachadas de vidrio verticales. La colocación vertical de los lucernarios es importante para las condiciones climáticas de Kuwait y ha demostrado ser una mejor opción que su situación en el plano horizontal. Un techo de vidrio horizontal aumenta el consumo de energía y es difícil de limpiar y mantener, elevando los gastos de mantenimiento. El edificio de oficinas superior está dividido en espacios iguales de 15 metros de ancho, separados por terrazas en varios niveles. En algunos casos, estas terrazas bajan hasta la planta baja en forma de patios y sirven para señalizar la entrada a cada departamento. La forma del lucernario pasa inadvertida desde el exterior donde se concibe como una fachada continua de vidrio que encierra los edificios volumétricos lineales de oficina. Sólo cuando uno está en el vestíbulo principal es consciente de los lucernarios verticales y los vacíos. Desde ese vestíbulo, cuando se levanta la vista hacia las oficinas, la vegetación plantada en las terrazas elevadas impide las vistas dentro, lográndose así la intimidad necesaria.

Plantas inferiores Hay tres áreas principales de aparcamiento que sirven al edificio y sus usuarios. Un aparcamiento de empleados en la parte trasera de la parcela y dos zonas de estacionamiento en superficie, destinadas a los visitantes e invitados VIP. Además, existen dos niveles de estacionamiento subterráneo bajo el edificio. El estacionamiento se divide en seis áreas que corresponden a los diversos departamentos para una mejor organización y flujo de vehículos y peatones.

Edificio de oficinas Los espacios de trabajo de las oficinas se encuentran por encima del vestíbulo principal y el podio y se organizan en bandas de igual ancho que cruzan el espacio zigzagueando y creando patios de diferentes características. La organización espacial de las oficinas sigue el esquema de oficina de combinación, que ha demostrado ser el modelo de espacio de trabajo más eficiente hasta ahora. Las oficinas de combinación se componen de una consolidación de puestos de trabajo en una habitación individual con acceso directo a un núcleo central común adecuado para una variedad de usos. Los puestos de trabajo individuales son oficinas individuales con divisiones establecidas a lo largo de la fachada, cada uno con una pequeña zona de reunión. Las oficinas de trabajo típicas ofrecen: Contacto visual directo con el exterior; Control individual de las condiciones del entorno de trabajo; y Diseño ergonómico, adaptación a las necesidades de los usuarios. El acabado de cristal transparente de las oficinas se envuelve con una segunda piel, a través de la cual se busca la climatización del edificio, protegiendo los espacios de trabajo de las radiaciones solares más perjudiciales. El acabado exterior de este sistema de lamas tiene un alto grado de reflexión que fomenta la continuidad en todo el perímetro exterior.