PRESENTACIÓN DEL ESTUDIO

Somos Ana Luisa Padilla, arquitecta, y Marcos Marinas, ingeniero técnico industrial fundadores de Aima Estudio. En el año 2010 creamos AIMA ESTUDIO uniendo nuestra pasión por el diseño y nuestras disciplinas particulares. Tras más de diez años de experiencia y junto a un equipo de profesionales especialistas en otros campos, hemos conseguido hacer que nuestro estudio tenga un sello de identidad propio y un estilo de diseño muy original que ofrece un asesoramiento personalizado a todos nuestros clientes.

Los proyectos que realizamos tienen un estilo contemporáneo, cálido, y en ellos siempre tiene una importancia especial la iluminación, incorporando, siempre que es posible, la luz natural y haciendo un uso de la luz artificial de forma dirigida para potenciar y enfatizar los elementos principales de los espacios. Aunque nuestros diseños siempre mantengan una línea moderna, fresca y acogedora, cada proyecto es único y diferente, y siempre estamos explorando nuevas ideas y experiencias personalizadas para cada nuevo cliente y cada nueva historia.

Nuestros trabajos reflejan el gusto por materiales naturales y sostenibles, como madera, cerámicos y piedra, textiles de calidad y el diseño original de muebles y decoraciones a medida, que dan un toque personal a todos nuestros diseños.

Ofrecemos un asesoramiento personalizado y cercano para cada cliente, siempre manteniendo el equilibrio entre la importancia de la estética en el diseño, y el desarrollo constructivo, su viabilidad y su funcionalidad en el espacio. Somos especialistas en interiores, ofreciendo servicios integrales que van desde el diseño inicial hasta la ejecución de obra y la decoración, e incluso branding y diseño gráfico en el caso de marcas que lo solicitan.

Nuestro objetivo principal es crear espacios únicos y especiales para cada proyecto, escuchando las historias de nuestros clientes y diseñando un lugar a medida para cada uno de ellos. Espacios hechos siempre con mucho cariño, dedicación y trabajo, desde la concepción de la idea inicial, hasta la ejecución en obra y todos sus detalles finales.

MEMORIA DESCRIPTIVA DEL PROYECTO

El proyecto de Le Panier ha supuesto un cambio radical en un antiguo local en Madrid, un reto en el que teníamos que crear un nuevo espacio dedicado a panadería y cafetería, desarrollando una imagen completa para una marca de nueva creación, Le Panier.

Los clientes, una pareja joven, querían abrir un negocio que fuera panadería y cafetería con productos naturales en Madrid. Cuando visitamos el local por primera vez, vimos que era un local pequeño en mal estado, de poca profundidad,  tenía los espacios divididos y que la fachada se encontraba en pésimas condiciones y, además, no llamaba la atención.

Por todo ello , decidimos que en la fachada deberíamos centrar el mayor cambio, siendo una fachada de gran extensión contaba con grandes posibilidades de convertirse en un reclamo para los viandantes. Optamos por dar mucha importancia a la fachada y conseguir un espacio que fuera visible desde la calle.

El tema central entorno al cual se desarrolla el proyecto, es la revalorización de la artesanía tradicional, con elementos artesanos y materiales naturales, así como inspiración en la arquitectura tradicional mediterránea que representa estos valores. Se eligió esta línea de diseño para el desarrollo del producto por estar en sintonía con la filosofía del nuevo negocio Le Panier, en el que prima la selección de productos de origen natural y artesano, de forma que le proporcionáramos una imagen que les representara. Elegimos tonos suaves y materiales naturales en tonos claros y colores que varían desde el blanco roto hasta los terracotas, pasando por arenas y tostados, reflejando el origen de los productos naturales y artesanales.

El local, de aproximadamente 70m2, tiene dos plantas. Quisimos dar mucha importancia a la fachada para crear un icono reconocible de la marca. Por eso, decidimos cambiarla por completo. Diseñamos los ventanales y la puerta principal con forma de arcos y perfilería negra, dando ritmo a la fachada y contrastando con el acabado en tono arena y toque rústico de la fachada. Todas las ventanas y puertas quedan cerradas por contraventanas del mismo tono y forma arqueada, aportando un estilo propio característico de la arquitectura tradicional artesanal en la que está inspirado el proyecto. Desde la calle accedemos a la planta de arriba, donde decidimos tirar todos los tabiques para conseguir un espacio diáfano. En esta planta se encuentra el espacio comercial, con zona de mostrador, una pequeña zona de barra de transición entre zona de ventas y la zona de mesas de la cafetería. En la planta baja, encontramos la cocina para la elaboración de productos propios, zona de personal, con vestuario y baño, y un despacho privado.

En cuanto a la paleta de colores, elegimos colores claros y los combinamos con tonos tierra, arena y rojizos aportando calidez y consiguiendo un espacio atractivo y acogedor. Utilizamos materiales sencillos con acabados artesanales como las fibras naturales, la madera y la cerámica para seguir con la línea de diseño de revalorización de artesanía y tradición.

En la zona de mostrador, destaca el mobiliario, estando todas las piezas diseñadas y fabricadas a medida por Aima estudio. El diseño de las piezas sigue la misma filosofía que el resto del interior, de líneas sencillas y aspecto natural y luminoso. Elegimos el blanco para conseguir amplitud y luminosidad, mientras que la panera y estantería situadas en la parte posterior se fabricaron en madera de roble para contrastar con los tonos claros y además aportar esa esencia natural y espíritu artesano que acompaña a todo el local. En la pared, un alicatado rectangular en color blanco y un pavimento porcelánico en tono beige con efecto de barro cocido recuerda a los cerámicos artesanales tradicionales. En la zona de comedor, un pequeño espacio de barra alta de madera y taburetes en madera y blanco, igual que las mesas y sillas de la sala, es la zona de transición intermedia entre zona de ventas y zona de mesas . En la zona de mesas el pavimento sigue la misma línea, siendo del mismo acabado, le dimos un punto de contraste, combinando el color beige con el terracota, buscando un efecto en el que se va subiendo el contraste de color y aumentando el ritmo de composición en el solado de un lado a otro del local, de forma que diferenciáramos espacios por zonas en una estancia diáfana.

Destacan los bancos corridos de obra, el bonito espejo a medida, que juega con las formas de la fachada y algunos toques de vegetación en la pared. Por último, para terminar de conformar un espacio en el que se diera valor a los elementos tradicionales y artesanos de nuestra construcción realizamos el techo en dos partes diferenciadas, la zona de venta, en la que instalamos un techo abovedado en blanco, y otra en la que dispusimos un acabado de ratán, que coinciden con el cambio de pavimentos y ayudan a separar ambientes. La puerta de acceso al aseo se encuentra en la sala de público por lo que quisimos darle un aspecto especial, toda recubierta de madera natural, y la diseñamos y ejecutamos nosotros mismos. A ambos lados de esta puerta instalamos un zócalo de enea natural y madera que potencia la estética natural y sencilla. En el baño jugamos a combinar varios tipos de azulejos para continuar el estilo artesanal y una atmósfera cálida.

En este caso también realizamos el diseño del logotipo de la nueva marca, en el que representamos los mismos valores y seguimos la misma estética del resto del proyecto Le Panier. Lo realizamos en los tonos tostados y naturales en el que desarrollamos el proyecto de diseño interior e incluyendo la forma con arco de su fachada en el propio logotipo. De esta forma completamos el diseño de imagen de la nueva marca, siguiendo todo las mismas líneas de diseño.