El centro se organiza alrededor de un mall abierto en forma de anillo que da acceso a las tiendas. La geometría variable del mall genera una secuencia de paseos, ensanchamientos y tres plazas principales que actúan como nodos de actividad.
Biografía
Batlle i Roig Arquitectes es una oficina de arquitectura creada el año 1981 por Enric Batlle y Joan Roig, formada por un equipo pluridisciplinar de persones jóvenes y con una amplia experiencia. Entienden la arquitectura y el paisaje como herramientas para definir la ciudad y las infraestructuras, vinculándolas de una manera sostenible al medio ambiente y al territorio.
Su oficina dispone de unas instalaciones de más de 600 metros cuadrados en un edificio aislado, construido por ellos mismos, en Esplugues de Llobregat, justo al lado de la entrada a la ciudad de Barcelona.
Batlle i Roig es una oficina de carácter transversal. Su equipo lo forman más de 60 profesionales del ámbito de la arquitectura, la arquitectura técnica, la ingeniería, el paisajismo y el diseño, capaces de proponer reflexiones arquitectónicas, medioambientales y paisajísticas.
Estructuran el equipo en temáticas: equipos que no se entienden como elementos estancos, si no como partes de un conjunto flexible y dinámico que se vertebra a partir del intercambio de información y de la colaboración con disciplinas tan diversas como son las ingenierías de instalaciones, el derecho urbanístico o las ciencias del medio.
Datos del edificio
Nombre: Centro de Innovación y Promoción del Ibérico en Jabugo. Huelva.
Localización: Jabugo, Huelva.
(España).
Usos: Sede del Consejo Regulador de la D.O.P Jamón de Jabugo, salas de exposiciones, Oficinas Coworking, Auditorio, bodega, cafetería, centro de visitantes.
Superficie: 1.762 m2 construidos y 7.560 espacios exteriores.
Presupuesto de Ejecución mate¬rial: 1.368.176 euros
Autores: Bakpak
Colaboradores: Marta Pérez Gon¬zalo y Patricia Pérez Lucas.
Director de Ejecución: Miguel San¬tos García Romero y José Anselmo Arteaga.
Promotor: A.G.A.P.A
Consultora Instalaciones: Eva Ji¬ménez del Rio.
Consultora Estructuras: Duarte y Asociados.
Fotógrafo: Jesús Granada.
Constructora: TRAGSA
El conjunto se entiende como un gran jardín que incluye tanto los aparcamientos perimetrales como el conjunto de paseos y plazas interiores. Trata de ligar con la sensibilidad mediterránea y con el mundo del jardín y los oasis.
El centro se ha concebido bajo parámetros de sostenibilidad y ahorro energético como el uso de materiales naturales y vegetación autóctona, la reducción de las emisiones de CO2, la gestión responsable del agua o la reducción de la contaminación lumínica.
¿URBANO O METROPOLITANO?
¿Se puede diseñar un centro comercial –Outlet o centro de fabricantes– que atienda simultáneamente al paisaje de la autopista –grandes infraestructuras, ferrocarril, ¿aeropuerto– y al paisaje urbano de nuestras ciudades metropolitanas –calles, paseos, transporte público–?
Este centro se ubica en una localización extraordinaria con frente a la autopista C-32 y en relación directa con la trama urbana consolidada de la ciudad de Viladecans. El centro se desarrolla en una parcela trapezoidal de casi 7 hectáreas que dispone de dos accesos principales, uno para vehículos que conecta directamente con la salida de la autopista C-32 que funciona como entrada principal a la ciudad de Viladecans y otro que conecta con el paseo urbano de la carretera de la Vila que vincula directamente este lugar con el centro urbano, con la cercana estación de ferrocarril y con los equipamientos y espacios libres que se sitúan en el entorno de la playa de la ciudad.
El centro adquiere la escala y la rotundidad necesaria para ser visto desde la autopista, pero también el cuidado y la urbanidad que se requieren para integrarlo en la trama urbana de la ciudad. Los dos accesos confieren al centro su carácter diferencial. Desde la autopista se accede a la rotonda de acceso y desde ella al aparcamiento perimetral del centro que conecta directamente con la gran puerta propuesta en la esquina más visible desde la autopista. Desde el centro de Viladecans se accede a una gran plaza de uso público que se desarrolla a un nivel superior desde el que se ve la totalidad del conjunto y desde la que se puede descender hacia el Mall interior. Un acceso muy METROPOLITANO y otro muy URBANO para integrar perfectamente este centro en el paisaje de Viladecans.
¿VILLAGE O CONTENEDOR?
¿Cómo podemos construir un centro comercial a cielo abierto que esté compuesto por una secuencia de pequeños comercios independientes sin reproducir los modelos habituales que se utilizan en las periferias metropolitanas – falsos pueblecitos tipo village o falsos entornos industriales reutilizados – y con la voluntad de conseguir unas arquitecturas contemporáneas que estén muy vinculadas a las características del lugar donde se ubican?
El centro – de 26.500m2 y 130 locales comerciales – se organiza alrededor de un Mall abierto en forma de anillo que conecta con los dos accesos principales y desde el que se accede a la totalidad de los locales. La geometría fragmentada y variable del Mall genera una diversidad de plazas interiores entre las que destaca la plaza central donde se concentran los locales de restauración. Desde el exterior se fomenta la unidad del conjunto y se remarcan los accesos principales, los accesos secundarios y los puntos más visibles desde el entorno urbano y metropolitano.
Una arquitectura contemporánea, cálida y natural define un conjunto muy homogéneo desde el exterior –con la escala y el tamaño de los recintos industriales y comerciales que podemos ver a lo largo de la autopista C-32- pero también nos ayuda a definir un interior muy fragmentado que adquiere la dimensión y el carácter de los pequeños núcleos urbanos. Unas características arquitectónicas que pretenden entroncar con la modernidad y el diseño de Barcelona a partir de la utilización de materiales naturales –piedra, madera tecnológica- y revestimientos tecnológicos de color blanco para acercarnos a un lugar cálido, mediterráneo, acogedor y chic. Un interior muy VILLAGE y un gran CONTENEDOR exterior, pero construidos desde la modernidad arquitectónica.
¿APARCAMIENTO EXTERIOR O SOTERRADO?
¿Se pueden integrar los aparcamientos necesarios –1700 plazas- dentro del conjunto edificado, de forma que se mantenga la voluntad del cliente de tener una única playa de aparcamiento exterior a un solo nivel, pero se consiga reducir el impacto habitual de este tipo de actuaciones –superficies enormes con grandes distancias a recorrer para acceder al centro- y se consiga aprovechar la posibilidad de construir un aparcamiento bajo el edificio que reduzca de forma muy considerable el volumen de rellenos de tierra a realizar?
El aparcamiento perimetral se sitúa en dos niveles diferenciados que se unen a través de una suave adaptación topográfica, permitiéndose así desarrollar un solo aparcamiento unitario, que en el acceso principal se encuentra al mismo nivel del Mall pero que después se deprime para adaptarse al nivel inferior donde se convierte en un aparcamiento semi-soterrado que se extiende por toda la parcela. Un solo aparcamiento que mantiene las virtudes de los aparcamientos EXTERIORES pero que se convierte en un aparcamiento SOTERRADO que acerca mucho las plazas de aparcamiento a los diversos accesos del centro.
¿PASEO URBANO O JARDÍN MEDITERRÁNEO?
¿Cómo podemos recuperar las características de nuestros paseos urbanos y de nuestras calles comerciales y compatibilizarlas con la voluntad de construir un lugar muy ajardinado?
El conjunto se entiende como un gran jardín que incluye tanto los aparcamientos perimetrales como la secuencia de paseos y plazas interiores. El carácter propuesto se acerca a las sensibilidades mediterráneas y fomenta la imagen de OASIS mediante la utilización de palmeras, de árboles de floración variados, de arbustos y flores de temporada, así como de diferentes fuentes ornamentales y de una gran plaza-fuente en el acceso desde la carretera de la Vila. Las diversas marquesinas de los locales comerciales nos ofrecen protección y sombras complementando el carácter de paseo urbano que se pretende obtener.
Todas las decisiones de diseño se han tomado con el objetivo de obtener el máximo ahorro energético y una alta calificación energética. Diversos parámetros de sostenibilidad como el uso de materiales naturales próximos, la plantación de especies autóctonas de bajo consumo hídrico, la reducción de emisiones de CO2, la gestión responsable del agua o la reducción de la contaminación lumínica nocturna complementan este nuevo PASEO URBANO a través de este nuevo JARDÍN MEDITERRÁNEO.
La primera decisión de proyecto es devolver al edificio del Tiro al Pichón su presencia originaria sobre la plaza. Para ello fue necesario demoler todas aquellas construcciones que erróneamente se habían adosado al edificio a lo largo de años de ampliaciones incontroladas.
El resto del proyecto se estructura a partir de la implantación de tres construcciones aisladas a las que denominados “majadas”. El proyecto interpreta esta tipología ya casi olvidada, y que tan importante ha sido para el mundo del cerdo ibérico.
Las tres nuevas piezas asumen su papel de ser neutras, dando el protagonismo absoluto al edifico existente. En cada una existe un espacio intermedio, ni exterior, ni interior, donde los visitantes podrán disfrutar de exposiciones e información sobre el mundo del cerdo.