Para Blanca Lleó ser arquitecta supone pensar sin prejuicios, no caer en la trampa de lo automático, lo obvio, lo establecido. La arquitectura debe proponer soluciones eficaces de cooperación ciudadana respaldada por las instituciones públicas y privadas.

BIOGRAFÍA

Blanca Lleó, Catedrática de arquitectura en la Universidad Politécnica de Ma­drid y Académica de la Real Academia de Doctores de España, dirige su propio estudio desde hace más de 30 años.

Destaca su investigación sobre la vivienda moderna y contemporánea y más re­cientemente su proyecto Vivir 100 Años Longevidad y Ciudad Futura, por los que ha recibido diversos premios como Premio Tesis Arquia, Premio extraordi­nario UPM o el Premio investigación BEAU 2016.

Entre sus obras arquitectónicas destacan: el Faro de Nules, el Ayuntamiento de Lorca y el parque de las salinas ganados en concursos internacionales; la in­tervención urbana en el centro histórico de Toledo seleccionado en los premios FAD; el edificio Mirador, premio del Ayuntamiento de Madrid y la BEAU; el edi­ficio Mare de Deu premio Endesa y el edificio Celosía finalista FAD y selecciona­do Premio Mies van der Rohe, entre otros.

ADN Y VALORES ARQUITECTÓNICOS

Para mí ser arquitecta supone pensar sin prejuicios, no caer en la tram­pa de lo automático, lo obvio, lo establecido. Porque el mundo no para de cambiar y si no entendemos qué está pasando a nuestro alre­dedor hoy y de cara el futuro, sobre todo en nuestra forma de vivir, haremos proyectos obsoletos y anacrónicos.

¿QUÉ DEMANDA EL CLIENTE HOY EN DÍA?

La sociedad aspira a la cohesión intergeneracional, la longevidad hoy tiene como aspecto positivo deseable el envejecimiento activo y cómo lado oscuro la soledad y el aislamiento.

La arquitectura debe proponer soluciones eficaces de cooperación ciudadana respaldada por las instituciones públicas y privadas.

PROYECTOS EN CURSO

Entre otros proyectos, estamos trabajando en un entorno singular para la creación del Centro del Románico de la Rioja Alta en Treviana, un concurso nacional convocado por el MITMA. Por otro lado, esta­mos terminando una casa para un cliente muy especial dotado de una green house y una galería de arte anexas. Finalmente, estamos realizando distintas intervenciones para un nuevo centro de enseñan­za que será modelo de innovación educativa. Es un proyecto privado apasionante, no sólo desde el punto de vista arquitectónico sino so­cial y humano.

FUTURO DE LA PROFESIÓN

Es fundamental que pensemos los espacios de manera más eficaz, esto supone simultaneidad de actividades y usuarios diversos. Por ejemplo, un parking de superficie fuera de horario comercial sería un excelente espacio deportivo de barrio o bien una dotación escolar (salón de actos, espacios exteriores, zonas deportivas, etc.) fuera del horario lectivo estaría disponible para un uso vecinal. Nosotros hemos planteado en el interior del Faro de Nules un espacio público abierto como paseo marítimo vertical; la infraestructura y el disfrute de las vistas son compatibles.